La Policía Nacional ha detenido en Arnedo y puesto en libertad con cargos a un hombre de 36 años, de nacionalidad georgiana y residente en Arnedo, tras desmantelarse un taller clandestino de confección de calzado en Arnedo, en el que trabajaban doce personas en condiciones precarias y en horario nocturno -para no ser localizados-; la mayoría de estas personas también son de nacionalidad georgiana.
Al hombre detenido se le atribuye un presunto delito contra los derechos de los trabajadores y otro contra los derechos de los ciudadanos extranjeros. El taller desmantelado estaba situado en el casco urbano de Arnedo, cerca de dos conocidos supermercados y se ha considerado que no reunía las mínimas medidas de seguridad e higiene, al margen de carecer de los controles e inspecciones reglamentarias.
Igualmente fueron detenidos los trabajadores en situación ilegal en España que, una vez incoados los correspondientes expedientes administrativos, quedaron en libertad.
Dispositivo de vigilancia
Las investigaciones llevadas a cabo por la Policía Nacional y la Inspección de Trabajo, se iniciaron gracias a una información recibida que hizo que los agentes se desplazaran a esta nave, donde establecieron un dispositivo de vigilancia. Comprobaron que en el inmueble se había instalado un taller clandestino destinado a la confección de calzado y en el que todos los ventanales estaban tapados para que no pudiera verse la luz desde el exterior y evitar ser detectado o sufrir una inspección.
Segundo taller clandestino desmantelado en un mes
Este es el segundo taller clandestino desmantelado por la Policía Nacional y la Inspección de Trabajo, después de que a finales de febrero del presente año también se pusiera fin a un taller clandestino en Arnedo con doce empleados y que no reunía las mínimas medidas de seguridad e higiene, careciendo de los controles y licencias necesarias para la actividad, por lo que fueron detenidas dos personas, un padre y un hijo.
