Era una tarde de ese run run especial que tienen los tendidos de Madrid ante las corridas de expectación, con tres toreros que Madrid tenía ganas de ver Diego Urdiales, Alejandro Talavante y Paco Ureña, todo esto sumado a lo ocurrido en los corrales la noche y la mañana anterior con los toros de Victorino Martín. Donde de los toros reseñados en principio para dicha fecha, solo uno pasó el reconocimiento previo, teniendo que traer más ganado de la finca de Las Tiesas.
El primero de la tarde y el primero para Diego, un toro de 592 kilos, alto y abierto de cara. Se fue arrastrado igual que salió, al burel le gustaba andar y nada ni nadie consiguió quitarle ese defecto y templarlo. Ante esa condición Diego no acertó con las teclas y decidió pasaportarlo entre los pitos de la grada. Complicada labor por cierto, ya que el arnedano lo consiguió tras varios pinchazos y descabellos. Terminando su labor con el abre plaza entre pitos tanto para él como para el toro en el arrastre.
La tarde parecía que levantaba el rumbo tras una buena faena de Talavante al noble segundo, consiguiendo una oreja, y otra gran faena de Ureña que de no haber fallado a espadas hubiera obtenido mayor premio que la vuelta al ruedo.
Pero en el cuarto, solo destacó el tercio de varas, donde Diego apostó por mostrarlo en el caballo dejándolo tres veces de largo con la buena respuesta de «Buscaplebes». Ya con la muleta , la faena del riojano nunca llegó a cuajar ante las pocas opciones que planteó su oponente.
Madrid, Feria de San Isidro.
Toros de Victorino Martín.
Diego Urdiales: pitos y pitos
Alejandro Talavante: oreja y pitos
Paco Ureña: vuelta al ruedo tras dos avisos y silencio.
Lleno de «No hay billetes» en la monumental de Las Ventas.