La Agencia Tributaria ha iniciado en las últimas horas diversas inspecciones presenciales en varias empresas relevantes de Arnedo, vinculadas con el sector del calzado. Unas actuaciones administrativas que habitualmente se inician para esclarecer si existe o no algún tipo de fraude fiscal en las respectivas sociedades, dentro del Plan General de Control Tributario de la Agencia Estatal de Administración Tributaria.
En estos momentos se está desarrollando un operativo en, al menos, tres empresas relevantes del sector del calzado y no es la primera vez que esto sucede, puesto que en los últimos meses, se han desarrollado varias operaciones de este tipo en empresas de la ciudad.
[Actualización 18:00h: Información ampliada sobre la Operación ‘SCARPE II’ de la Agencia Tributaria]
Amplio despliegue policial, el habitual en estas inspecciones
Aunque la presencia de agentes policiales o de Aduanas en estas inspecciones de la Agencia Tributaria generan bastante alarma social, lo cierto es que, según ha podido saber Noticias de Arnedo, entra dentro de la operativa habitual de este tipo de actuaciones del Departamento de Inspección contar la intervención de la Unidad de Auditoria Informática con el objetivo de detectar y analizar, en su caso, la existencia de programas informáticos de doble uso que facilitan la doble contabilidad o de ocultación parcial de la actividad real de la empresa y por tanto, el fraude.
No hay constancia de detenciones
En estos momentos no hay constancia de que se haya producido ninguna detención relacionada con estas inspecciones presenciales que, en su mayoría, suelen resolverse por la vía Administrativa sin que sea necesario el inicio de actuaciones de carácter penal.
Este tipo de inspecciones presenciales han permitido a la Agencia Tributaria recaudar más de 1.500 millones de euros en las más de 18.000 Actas de Inspección que esta entidad ha iniciado a numerosas empresas españolas desde el año 2014.
Inspecciones presenciales en empresas
Este tipo de inspecciones se producen cuando personal de la Agencia Tributaria, apoyados por funcionarios de otros departamentos, como los de Auditoria Informática o de Aduanas, así como agentes policiales que tengan competencias en la zona, acceden a la empresa que va a ser objeto de la inspección y requieren una serie de datos y documentos (físicos y digitales) que serán inspeccionados para comprobar si se está cometiendo algún tipo de fraude fiscal. Este tipo de operaciones son de carácter inicial y se suelen hacer sin previo aviso para favorecer las labores de inspección en la lucha contra el fraude y el control tributario de la Agencia Tributaria.
Si como resultado de estas inspecciones se detectara algún tipo de irregularidad fiscal se iniciarán las correspondientes actuaciones administrativas y si se detectara algún delito fiscal, se daría traslado a la vía penal para que un juez adoptase las medidas necesarias.
